Ya hemos presentado años atrás el que fuera el álbum debut de Dom La Nena, Ela, también muy recomendable (en ese trabajo tiene un acercamiento al tango argentino). Ahora con Soyo profundiza su relación con el pop y la música europea. Y como sabemos, canta y domina muy bien cuatro idiomas que intercala en sus canciones, así es que hay temas en francés, español, portugués e inglés. Esta señorita que nació en Brasil, creció en Buenos Aires y estudió música en Francia (donde reside), se dedica a cruzar las fronteras musicales y tradicionales con su propuesta folk pop.
Podría citarse al grupo multiétnico Beirut como una referencia de sonido acústico y melancólico, o el tratamiento sonoro que hace Juana Molina, para ubicar a los despistados. Aquí hallarán canciones naturalistas, del mundo femenino, que compone desde el piano, el ukelele o el cello (su instrumento primordial).
Como podrá notarse es todo bastante diverso ya de origen, y Dom La Nena (así es como se la conoce por su voz aniñada) desde París despliega sus conocimientos, tanto en música académica (por sus estudios formales), como en la raíz de la canción popular. Así es que todo fluye entre algunos valses, mucha referencia de la chanson francesa y otros temas más arraigados a la bossa nova; en todos suena siempre actual y con una misma impronta personal.
Muy sutil en los cambios de ritmo y bien contextualizado en un audio perfecto, orgánico y que parece puramente acústico. Los arreglos y timbres son muchos, pues a los instrumentos mencionados suman guitarras (acústicas y eléctricas), percusiones, coros, palmas, algún viento, bajo, xilofón y leves retoques digitales.
El concepto general es claro y encantador en once canciones propias que respetan la estructura común de la canción pop; a la vez que se instala en la tradición del folk como se conoce actualmente, con una miscelánea en tono de nostalgia dulce.
Club del Disco
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