Luego de un año lleno de éxitos, Indios sale a la cancha con su tercer disco de estudio, Besos en la Espalda. Los chicos de Rosario giraron por todo México, donde este mismo año los esperan para compartir escenario con Guns N’ Roses y Babasónicos, entre otros. Llenaron Niceto, Vorterix en Buenos Aires, La Sala de Las Artes en Rosario y el Studio Theater de Córdoba. Lo de under ya les queda corto y quedó como una definición estética y artística.
El proyecto encabezado por Joaquín Vitola y Nicolás de Sanctis no para de crecer y en este álbum presentan doce temas nuevos donde esa solidez e identidad consolidada se hacen notar. Las influencias: algo de brit-pop, Soda Stereo, Babasónicos, pero el sonido es propio. Libertad y originalidad priman en el grupo rosarino, así lo definen ellos mismos.
Una base de R&B y funky se cruzan con una melodía pop y melancólica y dan inicio a Perdiendo la Cabeza (track 5). Luego llega Tardes de Melancolía (track 9), una canción más tranquila y compañera, con una guitarra levemente distorsionada y una voz suave. Algo se mantiene a lo largo de las composiciones y parece marcar una característica estética de la banda, muchos planos que engañan, que parecen simples, pero forman una totalidad compleja que da placer escuchar.
Indios no improvisa, la banda no sólo piensa en la música sino en el conjunto de lo que transmiten, tanto a nivel audiovisual, en la escenografía y en el vestuario, como en la puesta en escena. Ellos lo consideran una experiencia 360°, una producción artística general.
Club del Disco
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