Este nuevo volumen de la serie Por qué escuchamos a... de la editorial Gourmet Musical en realidad podría haberse llamado Por qué no escuchamos a Ignacio Corsini, de acuerdo a lo que suscribe el sorpresivo escritor, Pablo Dacal. Sí, es el mismo Dacal cantautor a quien conocimos gracias al fantástico (y agotado) El corazón es el lugar, Disco del Mes en agosto de 2013, y de otros álbumes, que acá se dedica a indagar los caminos transitados por el cantor oriundo de Sicilia con un estilo de escritura algo arcaico, poético y pudoroso a la vez.
Pero Dacal no se contenta con construir una muy prolija reconstrucción de la vida y obra de Corsini, sino que contrapone su figura a la del cantor nacional por excelencia y contemporáneo suyo, Carlos Gardel (también niño migrante, según la mayoría de sus biógrafos. Amigos y rivales, Corsini y Gardel representan estéticas diferentes y sus objetivos también eran otros; tal es la tesis del autor. Esa línea lo lleva a algunos arrebatos en la escritura que no leerán con simpatía los gardelianos (que son muchos), pero que son coherentes con la línea elegida por el escritor-artista.
También en la operación de vindicar la figura de Corsini y la estética que representa, Pablo Dacal encuentra un modelo a seguir, por cierto muy alejado de Gardel y todo lo que éste representó (y representa). Lo profundamente federal; el cantor de los caminos; el juglar sólo acompañado por guitarras: ¿cómo no va a ver en Corsini un espejo no tan lejano de sí mismo? Por eso este libro formalmente dedicado al cantor de lo criollo, también habla un poco de Pablo Dacal, el cantor. Leerlo obliga a escuchar a Corsini, pero también a escuchar con nuevos oídos a Dacal. Es un texto cuya lectura despierta muchas preguntas y abre nuevos sentidos, lo cual siempre se agradece. Ojalá sirva para que Corsini sume nuevos fieles y, por qué no, Dacal también.
Club del Disco
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