Hace poco más de dos año que se fue el Chango Farías Gómez. En más de cincuenta años de carrera fue siempre un vanguardista del folklore, si cabe la contradicción, y La Orquesta Popular de Cámara Los Amigos del Chango, tal es el nombre completo, es su legado. Este es un disco póstumo, hecho por quienes lo acompañaron en esta última aventura en la que el Chango está y no está al mismo tiempo.
El nombre del disco tiene su sello, ya que el repertorio elegido no se queda en lo que habitualmente se llama folklore, sino que abarca al tango (figuran María y Garúa, dos tangos con música de Aníbal Troilo) y dentro del folklore elige también versionar La oncena, que no es precisamente música tradicional... Pero lo cierto es que con la excepción de esos dos tangos, las especies rítmicas son todas del Norte (no hay nada del Litoral, por ej.).
El nombre de la agrupación también tiene su rasgo de provocación, ya que "orquesta" y "cámara" son conceptos algo opuestos, lo mismo que ponerle nombre académico a un grupo que hace música popular. Todo muy típico del Chango, que siempre puso nombres eficaces y llamativos a sus agrupaciones (¿hay acaso alguna que no haya hecho historia?).
Veamos cómo está conformada esta Orquesta. Sería muy cómoda la comparación con una big band de jazz; pero en los hechos no es así, ya que no hay tanta primacía de los vientos, hay más equilibrio. Dos percusionistas (uno tocando la batería), dos guitarristas (uno tocando una eléctrica), bandoneón, bajo, violín y, sí, los vientos: clarinete, trompeta y flauta. Por supuesto, no podía faltar el piano...
Los arreglos, todos del Chango, son muy variados y la orquestación de Néstor Gómez, uno de los guitarristas, varía la densidad en cada tema de acuerdo a las necesidades expresivas que tenga la obra.
Con algunas figuras importantes en el equipo (como el Mono Izarrualde, flautista ladero del Chango muchos años) y con un ajuste sorprendente y un swing envidiable, con la sobrecogedora experiencia de escuchar la voz de Farías Gómez como un crooner saboreando María, y con la confirmación de la genialidad de este porteño algo caprichoso pero talentoso como pocos, la escucha de este primer CD de su último emprendimiento musical nos deja llenos de buen gusto los oídos y el alma.
Producido por Los Amigos del Chango
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Excelente!